Una mujer entra a la agencia de BMW. Ve un automóvil que le parece perfecto
y se acerca a inspeccionarlo.
Al agacharse para tocar el interior, se le escapa un sonoro pedo!
Muy afligida, voltea nerviosa para ver si alguien notó su pequeño accidente
y se encuentra con un vendedor parado allí, al lado suyo.
Buen día, Señorita. ¿En qué le puedo ayudar?
Muy incómoda y disimulando el rubor le pregunta:
- ¿Qué precio tiene este Precioso Automóvil?
El vendedor responde:
- Mi querida señorita... si se le salió un pedo al tocarlo... cuando le
diga el precio se va a cagar!!!